Durante esta semana se desarrolla la Convención del Partido Republicano, para oficializar la candidatura del actual presidente de los Estados Unidos de Norteamérica, Donald Trump, de cara a las elecciones del 3 de Noviembre próximo, en su afán por retener su puesto en la Casa Blanca.
La jornada del Martes fué prácticamente un desfile propagandístico de la familia Trump, vimos cómo tanto hijos y su esposa Melania Trump, hicieron gala de sus palabras dirigidas a resaltar el papel desempeñado por su padre y esposo, al frente de la nación estadounidense.
Socialismo, fué la palabra clave de la noche, ante la cuál tanto Trump cómo sus invitados en el podio, acusaron a la candidatura demócrata, en la figura de Joe Biden, del peligro de conducir al país hacia el socialismo, de resultar victoriosos en las elecciones.
En repetidas ocasiones, Trump, y su equipo de campaña, hacen alusión a esta amenaza, advirtiendo al pueblo estadounidense de lo que pasaría si los demócratas legaran al poder, por lo que les pidió que le otorgaran su voto para ser elegido, y seguir trabajando por la prosperidad y el bienestar de los Estados Unidos.
Una convención en la cuál se trato de disminuir el impactor real de la pandemia del Covid-19, que le ha costado tantas vidas al pueblo norteamericano, y que ha reflejado claramente la incapacidad de la administración Trump para enfrentar una emergencia sanitaria como esta.
Joe Biden supera a Donald Trump en las encuestas desde hace varias semanas, en un rango de diferencia en la intención de votos de un 8%.