El Gobierno serbio está decidido a mantener una política neutral desde el punto de vista militar y abstenerse de unirse a la OTAN u otras alianzas militares, a pesar de que, en política exterior, el país balcánico busca la adhesión a la Unión Europea.

En ocasión del 13 ° aniversario del gobernante ‘Partido Progresista Serbio’, el presidente serbio, Aleksandar Vucic, dijo en su discurso a la nación el sábado que «Serbia nunca terminará su amistad con Rusia y China».

«Serbia está en el camino europeo, lo cual es importante para nosotros, pero Serbia siempre ha valorado a sus amigos. Nunca les hemos dado la espalda a nuestros amigos, incluso cuando estaban pasando por momentos difíciles, incluso cuando era difícil para nosotros resistir. presión», dijo Vucic.

El mandatario argumentó, que por esa razón «Serbia está recibiendo su gas al precio más bajo de Europa y puede contar con el apoyo amistoso de muchas naciones en relación con la cuestión de Kosovo y Metohija. A pesar de la presión, Serbia no rechazará su amistad con la Federación de Rusia y la República Popular de China», insistió el presidente.

El Gobierno serbio está decidido a mantener una política neutral desde el punto de vista militar y abstenerse de unirse a la OTAN u otras alianzas militares, a pesar de que, en política exterior, el país balcánico busca la adhesión a la Unión Europea. Al mismo tiempo, las autoridades serbias buscan combinar esa esperada integración en UE, con la preservación de relaciones amistosas con Rusia y China, así como, el desarrollo de sus relaciones con Estados Unidos.

Sin embargo, para cumplir su deseo de la eurointegración, las autoridades de la Unión Europea le han dicho a Serbia en repetidas ocasiones que ello es solo posible si se cumplen dos condiciones básicas: el reconocimiento de la independencia de Kosovo y la terminación de suss relaciones amistosas con Rusia y su cooperación activa con China.

En términos económicos, lo más importante para Serbia y toda la región de los Balcanes, pasa por el desarrollo de los vínculos y la cooperación con la Federación de Rusia y la República Popular China. Las estimaciones de las inversiones totales de China en Serbia ronda los 10 mil millones de euros, mientra que Rusia se encuentra en alrededor de 4 mil millones.

El conocido punto de vista de que los Balcanes son el «polvorín» de Europa, sigue siendo relevante en la actualidad, y Serbia es el país más importante y clave en esa región. En China consideran, que los Balcanes son una puerta abierta para aumentar el intercambio comercial hacia Europa.

Las empresas chinas están construyendo masivamente ferrocarriles y carreteras, incluida una ruta desde el puerto griego de El Pireo a Budapest y una ruta desde el puerto montenegrino de Bar. Otro proyecto por valor de 3.200 millones de euros será la construcción de una red de alcantarillado e instalaciones de tratamiento por parte de empresas chinas en Serbia.

En 2009, tras una visita de siete días del presidente serbio Boris Tadic a Beijing, se firmó un acuerdo de asociación estratégica entre los dos países. La iniciativa ’17 + 1′, de China (Europa Central y Oriental más China), lanzada en 2012, profundizó esta relación. La visita del presidente chino Xi Jinping a Belgrado en junio de 2016 condujo a la primera gran inversión, cuando los chinos rescataron la devastada empresa metalúrgica serbia Zelezara Smederevo al adquirirla.

La interacción se desarrolló aún más cuando Aleksandr Vucic asumió el liderazgo del país. Por el momento, China es el tercer socio comercial de Serbia (después de Alemania e Italia). Según los resultados de 2020, el volumen de negocios comercial serbio-chino ascenderp a 3.180 millones de euros en 2024.

En conversación para TASS, Milos Banjur, parlamentario de la Asamblea Popular Serbia en representación del gobernante Partido Progresista Serbio (SPP), declaró, que «la expansión económica de China hacia Europa pasa por Serbia, ya que el Imperio Celeste reconoce a los Balcanes como un vínculo importante en este camino. La Iniciativa 17 + 1 une a China y 17 países de Europa Central y Oriental».

En este contexto, dijo Banjur, «China presta especial atención a Serbia y Grecia, un antiguo miembro de la UE, a la que los chinos compraron el puerto de El Pireo. Si compran el puerto de Bar en Montenegro o algún otro puerto en los mares Jónico o Egeo, las rutas de transporte por tierra a Europa Central y Oriental pasar por Serbia. Con todo lo dicho, creo que es importante el hecho de que Serbia está en el centro de las inversiones chinas», expresó el diputado serbio.

La esfera tradicional rusa en Serbia es el petróleo y el gas, el 90% de las inversiones rusas están en energía y el 10% en agricultura.

La influencia económica rusa en Serbia por su parte, está tradicionalmente representada por los hidrocarburos. La mayor inversión rusa en esta área, Niftna Industria Srbije (NIS, el principal accionista es GazpromNeft) opera con éxito en el mercado y se está desarrollando activamente.

«GazpromNeft compró NIS en 2008 por 400 millones de euros con el compromiso de invertir 500 millones de euros. En ese momento, NIS tenía un deuda de 950 millones de euros con una pérdida anual de 90 millones de euros. Las inversiones totales de Gazpromneft en NIS ascendieron a unos 3 mil millones de euros, y hoy NIS es un ejemplo a seguir», explicó Milos Banjur, al medio de comunicación ruso.

Una etapa importante en la profundización de la cooperación energética entre Rusia y Serbia fue la apertura del gasoducto Balkan Stream (continuación del Turkish Stream) con una longitud de 403 km con una capacidad de diseño de 13,9 mil millones de metros cúbicos de gas por año.

Rusia también otorgó a Serbia un préstamo para la modernización y construcción de la red ferroviaria. Desde 2014, el holding de ferrocarriles rusos ha reconstruido las líneas Belgrado – Pancevo, Resnik – Valjevo, instalaciones de infraestructura como parte del desarrollo del décimo corredor de transporte paneuropeo.

En enero de 2019, Russian Railways International y Serbian Railways Infrastructure firmaron documentos que cubren el diseño y la construcción de un único centro de despacho para el control del tráfico de trenes en la república.

Los contratos también incluyen las obras y el suministro de materiales como parte de la segunda etapa de reconstrucción, modernización y construcción de un ferrocarril de doble vía a una velocidad de hasta 200 km por hora en el tramo Stara Pazova – Novi Sad con una longitud de 40,44 kilometros. Además, el holding Russian Railways desarrollará un proyecto para la renovación de la línea Valjevo – Vrbnitsa (la frontera estatal con Montenegro tiene 210 km de longitud).

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