El Parlamento ruso apoyó en su mayoría una ley sobre la autoridad pública regional, mediante la cuál se prohíbe a los líderes súbditos de la federación ser llamados «presidentes», a la vez que permite que éstos sean elegidos por más de dos mandatos consecutivos.
Los diputados del Parlamento ruso (Duma Estatal) apoyaron en la segunda y tercera lecturas el proyecto de ley sobre la organización del poder público en las regiones. El documento, entre otras cosas, prohíbe a los líderes súbditos de la Federación de Rusia ser llamados «presidentes», permitiendo a su vez, que éstos sean elegidos por más de dos mandatos consecutivos.
El senador Andrei Klishas y el diputado Pavel Krasheninnikov, fueron los autores de la iniciativa, cuya primera lectura tuvo lugar el 9 de noviembre último y el día anterior fue reexaminada por miembros del Comité de Construcción y Legislación del Estado de Parlamento ruso.
En explicaciones a la prensa, el comité parlamentario a cargo del análisis del proyecto de ley, detalló que la devolución del mismo se debió a cambios técnicos, y no conceptuales. En la segunda lectura del documento, se recibió el apoyo necesario a la propuesta, según la cual, al máximo órgano del poder ejecutivo se le puede llamar no solo «gobierno», sino también de otra forma, en base a tradiciones históricas y nacionales. Más de 200 enmiendas fueron recibidas.
El documento define los principios de actuación de las autoridades en las entidades constitutivas de la Federación de Rusia. Al mismo tiempo, la ley permite transferir parte de los poderes federales a un nivel inferior, si esto no contradice la ley básica.
También se estipula que las leyes y reglamentos regionales no pueden contradecir las disposiciones de la Ley Federal o la Constitución. El portavoz de la cámara de diputados rusos, Viacheslav Volodin, señaló que la iniciativa es parte del trabajo sistemático de actualización de la legislación, que es necesaria después de la aprobación de enmiendas a la Constitución rusa.
Los diputados también apoyaron la modificación de la legislación sobre el derecho a ser elegido para el cargo de máximo funcionario. Ahora el jefe de la región no puede postular su candidatura por tercera vez consecutiva, quieren abandonar esta restricción.
El número de mandatos en el cargo de gobernadores será determinado por la legislatura local. Además, la ley permitirá a los parlamentos locales trabajar de forma remota. Al mismo tiempo, los autores del proyecto proponen establecer una cláusula según la cual el mandato del jefe de la región y el parlamento será de cinco años. Ahora no puede exceder los cinco años.
En ese orden, se mantiene la prohibición actual del uso de la palabra «presidente» en el título del cargo de jefe de una entidad constituyente de la federación. El Consejo de Estado de Tartaristán se opuso a esto, donde se nombra así al titular, pero las objeciones y propuestas de los diputados de esa república fueron rechazadas.
La iniciativa sugiere además, que el presidente puede relevar al gobernador de sus funciones debido a una pérdida de confianza, o si los miembros de la legislatura local no expresan confianza en él. En general, según el proyecto de ley, el jefe de Estado puede rescindir los poderes de los jefes de región por cualquier motivo.
Finalmente, el documento obliga a crear a nivel regional órganos de control y contabilidad que verifiquen los presupuestos y fondos extrapresupuestarios.
