Al mismo tiempo, Biden destacó al adoptar esta medida, Estados Unidos «entiende» que sus aliados en Europa no pueden unirse a la prohibición de importar energía de Rusia, debido a la dependencia directa de esos combustibles.
El presidente estadounidense, Joe Biden, anunció en la mañana de este martes la prohibición para la importación del petróleo y gas rusos en su país, sobre la base de un acuerdo alcanzado durante la última jornada de una sesión del Congreso de EEUU, entre los representantes demócratas y republicanos en represalia a la operación militar especial de Rusia sobre Ucrania, iniciada el pasado 24 de febrero.
«Hoy anuncio que Estado Unidos está apuntando a la arteria principal de la economía de Rusia», «el petróleo ruso ya no será aceptado en puertos de EE.UU. y los estadounidenses asestarán otro potente golpe contra la máquina de guerra de Putin», señaló el mandatario estadounidense. Sin embargo, Biden reconoció que trás la medida, los precios de los derivados del petróleo como la gasolina, verán un incremento sustancial en Estados Unidos.
Al mismo tiempo, Biden destacó al adoptar esta medida, Estados Unidos «entiende» que sus aliados en Europa no pueden unirse a la prohibición de importar energía de Rusia, debido a la dependencia directa de esos combustibles. «Estamos trabajando estrechamente con Europa y nuestros socios para desarrollar una estrategia a largo plazo para reducir también su dependencia de la energía rusa», precisó el presidente norteamericano.
El acuerdo bipartidista alcanzado el lunes, sobre un proyecto de ley que castigaría a Rusia por «invadir» Ucrania, busca prohibir las importaciones estadounidenses de petróleo ruso y facultar aún más al presidente Biden para imponer aranceles a los productos del país euroasiático.
Los legisladores estadounidenses buscaron combinar sus sanciones contra el Kremlin, con un impulso relacionado para reforzar a Ucrania con miles de millones de dólares en asistencia humanitaria, militar y económica, indicó The Washington Post.
Sin embargo, resalta el diario norteamericano, al tratar de «infligir dolor a Rusia», la estrategia estadounidense amenazó con tener consecuencias económicas más amplias. El promedio industrial Dow Jones cerró con una caída de alrededor de 800 puntos el lunes, una caída de alrededor del 2,4 por ciento, ya que la guerra desató otro tumultuoso día de negociación en Wall Street. El Nasdaq de tecnología pesada cayó alrededor de 480 puntos, o un 3,6 por ciento.
“Me gustaría señalar que en lo que más se enfoca el presidente es en garantizar que sigamos tomando medidas para generar consecuencias económicas punitivas para (el presidente ruso Vladimir) Putin, mientras se toman todas las medidas necesarias para limitar el impacto en los precios en la bomba de gasolina”, dijo la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, en su sesión informativa el lunes.
El nuevo acuerdo bipartidista limitaría las importaciones de energía rusa, suspendería las relaciones comerciales normales entre Estados Unidos y el Kremlin y encargaría a la administración Biden que busque la suspensión de Rusia de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
La ley también prevé la adopción de esas sanciones comerciales a Bielorrusia, considerada por la Casa Blanca como un aliado clave de Rusia en el conflicto de Ucrania, según los cuatro miembros del Congreso que redactaron el acuerdo.
“Mientras Rusia continúa su ataque no provocado contra el pueblo ucraniano, hemos acordado un camino legislativo para prohibir la importación de productos energéticos de Rusia y suspender las relaciones comerciales normales tanto con Rusia como con Bielorrusia”, dijeron los legislacores estadounidenses, en una declaración conjunta bipartidista.
“Tomar estas acciones enviará un mensaje claro a Putin de que su guerra es inaceptable y que Estados Unidos se mantiene firme con nuestros aliados de la OTAN”, señala el documento, y se agregó, que el Congreso «aún necesita hacer más”.
En Estados Unidos actualmente los precios del petróleo y la gasolina se han mantenido muy altos, con un promedio nacional por galón en la bomba de más de 4 dólares, según refleja la Asociación Norteamericana de Automóviles (AAA). Mientras tanto, el servicio de rastreo GasBuddy estimó el lunes que los precios en realidad rompieron el récord existente en Estados Unidos establecido en 2008.
No está claro cómo la prohibición estadounidense recientemente propuesta sobre el crudo ruso podría afectar la economía global. Pero la perspectiva de una mayor interrupción llevó a los altos funcionarios de la administración Biden y a los principales legisladores del Congreso a reconocer la posible carga y comenzar a explorar formas en que podrían evitar que las familias estadounidenses asuman costos adicionales.
