El derecho de los pueblos a la autodeterminación está consagrado en la Carta de la ONU y otros documentos internacionales, dijo el director del Segundo Departamento de Países de la CEI del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, Alexéi Polishchuk.

El director del Segundo Departamento de Países de la CEI (Comunidad de Estados Independientes) del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, Alexéi Polishchuk, declaró en una conversación con la agencia estatal rusa de noticias TASS, que los residentes de los nuevos territorios liberados en Ucrania tendrán derecho a determinar su futuro por sí mismos.

“Partimos del hecho de que los residentes de estos territorios tienen derecho a determinar su propio futuro. El derecho de los pueblos a la autodeterminación está consagrado en la Carta de la ONU y otros documentos internacionales”, dijo el alto diplomático ruso, respondiendo a una pregunta. sobre la posibilidad de celebrar referéndums sobre nuevos territorios liberados durante la operación militar especial.

Como recordó Polishchuk, la Declaración de 1970 sobre los principios del derecho internacional relativos a las relaciones amistosas y la cooperación entre los Estados dice que los pueblos no pueden ser privados por la fuerza del derecho a la libre determinación.

«Y si esto ocurre, los pueblos pueden tomar medidas contra tales acciones de fuerza y ​​recibir el apoyo de la comunidad internacional», agregó el alto diplomático.

«Es por eso que apoyamos los referéndums en la RPD (República Popular de Donetsk), la RPL (República Popular de Lugansk), las regiones de ZaporozhIe y Jérson, reconocimos sus resultados y los aceptamos en Rusia», puntualizó Polishchuk.

Del 23 al 27 de septiembre últimos, la República Popular de Donetsk y la República Popular de Lugansk, así como la Región de Jérson y la Región de Zaporozhie celebraron referéndums en los que la mayoría de los votantes optaron por unirse a Rusia.

El 30 de septiembre pasado, el presidente ruso Vladimir Putin y los líderes de la RPD y la RPL, las regiones de Zaporozhie y Jérson firmaron tratados sobre su adhesión a Rusia. Posteriormente, la Duma Estatal y el Consejo de la Federación (las cámaras baja y alta del parlamento ruso) aprobaron leyes sobre la ratificación de estos tratados, así como leyes constitucionales federales sobre la adhesión de las cuatro regiones a Rusia.

Moldavia está consciente de las líneas rojas de Rusia bajo el problema de Transnistria.

Durante la entrevista, Polishchuk destacó que Moldavia es muy consciente de la posición de Moscú y sus líneas rojas en el problema de Transnistria. “Chisinau (capital de Moldavia) es muy consciente de la posición de Rusia sobre este problema (de Transnistria), que le hemos señalado repetidamente, incluidas las principales líneas rojas para nosotros”, manifestó el diplomático de alto rango.

Como indicó Polishchuk, «el tema del acuerdo de Transnistria, incluido un componente tan importante como la misión de mantenimiento de la paz en el área de Dniéster, está invariablemente en la agenda» del diálogo de Rusia con la parte moldava.

Polishchuk afirmó que el régimen de Kiev está tratando de provocar a Moldavia al uso de la fuerza en Transnistria. “En abril-junio, se llevó a cabo una serie de ataques terroristas en Transnistria y sus rastros, como dice Tiraspol, conducen a Ucrania. Simultáneamente, Kiev hace acusaciones sobre una amenaza que emana del contingente militar ruso que está de servicio en la orilla izquierda. del río Dniéster. El objetivo es obvio: tratar de provocar a las autoridades moldavas al uso de la fuerza (en Transnistria)», detalló el funcionario ruso.

«El peligro de la escalada en Transnistria persiste». «Esto está relacionado con los intentos de fuerzas externas, en primer lugar, de Kiev, para desestabilizar la situación en la región», advirtió Polishchuk. Agregó que «es gratificante que Chisinau comprenda las consecuencias de ‘descongelar’ el conflicto en el área del Dniéster y no reaccione ante tales provocaciones».

«No se puede ver ninguna alternativa al formato 5+2 (que involucra a Moldavia y Transnistria como partes en el conflicto, Rusia, Ucrania y el organismo de control de seguridad europeo OSCE como mediadores y Estados Unidos y la Unión Europea como observadores)», enfatizó el diplomático ruso.

«A pesar de una pausa en el trabajo, (el formato 5+2) sigue siendo el único mecanismo multilateral cuyo marco permite buscar una solución integral al problema del Dniéster». «En la situación actual, es más importante que nunca «desarrollar un diálogo productivo entre ambas orillas del Dniéster», explicó Polishchuk.

«Esto se relaciona no solo con la interacción en términos de resolver problemas prácticos en las esferas comercial y económica, de transporte y logística, médica y otras que influyen directamente en los residentes comunes de la región. Todavía hay algo en lo que trabajar en este sentido», dijo el funcionario.

Como recordó el diplomático, Tiraspol (capital de Transnistria) «ha pedido repetidamente a Chisinau que inicie conversaciones sustantivas sobre los parámetros de un arreglo integral en la región de Dniéster». «Sin embargo, hasta la fecha no ha habido una respuesta clara de la parte moldava y sin pasos constructivos recíprocos difícilmente se pueden esperar cambios en el acuerdo de Transnistria», acotó Polishchuk.

Al respecto, el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, dijo en una reunión con estudiantes y personal docente de la Universidad MGIMO el 1 de septiembre que «cualquier acción que amenace la seguridad de las fuerzas de paz rusas en la república no reconocida de Transnistria se calificará como un ataque a Rusia».

La República de Transnistria fue proclamada el 2 de septiembre de 1990, en la margen izquierda del río Dniéster y tiene una población predominantemente de habla rusa. Los residentes de la región se opusieron a los políticos moldavos radicales que buscaban la secesión de la república moldava de la URSS y su unificación con Rumania en ese momento.

156230cookie-checkResidentes de territorios ucranianos liberados por fuerzas rusas determinarán su propio futuro, dice diplomático

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