El líder brasileño también propuso establecer un formato internacional amplio de conversaciones que podría ser similar al G20 para discutir la paz en Ucrania.
El presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, dijo que estaría listo para mediar en las conversaciones entre el presidente ruso, Vladimir Putin, y su homólogo ucraniano, Volodimir Zelenski, si fuera necesario.
«Si puedo ayudar, ayudaré. Pero si surge la necesidad de mantener conversaciones con Putin y Zelenski, estaré listo para discutir los esfuerzos de paz, no hay problema», enfatizó da Silva.
«Lo que realmente necesitamos es reunir a un grupo de personas lo suficientemente poderosas para ser respetados en la mesa de negociaciones. Y debemos comprometernos con ambos”, dijo el presidente de Brasil en una conferencia de prensa conjunta con el canciller alemán Olaf Scholz el lunes.
El político también propuso establecer un formato internacional amplio de conversaciones que podría ser similar al G20 para discutir la paz en Ucrania.
El líder brasileño dijo que ya había discutido esto con Scholz y el presidente francés Emmanuel Macron y que tenía la intención de plantear el tema en las negociaciones con el presidente estadounidense Joe Biden en febrero y con el líder chino Xi Jinping en marzo.
Al mismo tiempo, se supo que el presidente de Brasil rechazó la solicitud de su homólogo francés, Emmanuel Macron, de enviar ayuda militar a Ucrania, expresando en cambio su voluntad de «participar activamente en la búsqueda de una solución pacífica», escribió Jamil Chade, columnista de Ginebra del portal de Internet UOL de Brasilia.
Citando fuentes que participaron en una llamada telefónica de una hora entre los dos líderes el jueves pasado, el periodista señala que Lula da Silva le dijo a Macron sobre «la necesidad de negociar con Rusia para concluir una tregua».
Aunque Brasil continúa condenando la operación militar especial de Moscú en Ucrania, no está, sin embargo, dispuesto a «ayudar en las operaciones militares», atribuyendo cierta responsabilidad de la situación a la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte), que «en los últimos años no ha contribuido al establecimiento de relaciones basadas en la confianza con el Kremlin».
Europa no oculta que con su apoyo a Lula da Silva ante las protestas de enero en la capital brasileña contra el gobierno de turno, espera a cambio llamar la atención del líder brasileño sobre temas de interés para los centros de poder en Europa, Chade dijo.
«Pero quedó claro en la conversación que Lula no tomaría ninguna posición en temas internacionales solo para complacer a nuevos aliados», resumió el autor.
Como informó anteriormente el servicio de prensa del líder brasileño, la búsqueda de la paz entre Ucrania y Rusia ameritó un profundo intercambio de puntos de vista entre los presidentes. «Lula enfatizó la necesidad de una mayor participación de los líderes mundiales» dentro de la ONU y el G20 para lograr este objetivo, informó.
