El PCV se retiró en 2020 del Gran Polo Patriótico, una coalición de partidos de izquierda ideada por Hugo Chávez, y que es liderada por el gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), trás acusar al gobierno del presidente Nicolás Maduro de adoptar sistemáticas políticas «antiobreras».
El Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) intervino al Partido Comunista de Venezuela (PCV) y nombró a una junta directiva ad-hoc-, según una sentencia divulgada el viernes 11 de agosto por la noche. Mediante el recurso, el TSJ se declaró competente para conocer de una acción de amparo constitucional interpuesta en julio por un supuesto grupo de militantes comunistas que calificó de «ilegal» a la junta directiva del PCV.
A partir de ese momento, la máxima instancia del Poder Judicial venezolano nombró a una junta para que “organice los procesos democráticos internos que garanticen los derechos a la participación política de los asociados” del PCV. Henry Parra, un militante que fue expulsado del partido en 2021 tras haber manifestado apoyo a un gobernador oficialista, encabezó la acción judicial y fue nombrado por el TSJ presidente del PCV.
El PCV se retiró en 2020 del Gran Polo Patriótico, una coalición de partidos de izquierda ideada por Hugo Chávez, y que es liderada por el gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), trás acusar al gobierno del presidente Nicolás Maduro de adoptar sistemáticas políticas «antiobreras».
En medio de la crisis venezolana, el PCV se ha mostrado duramente critico al gobierno de Nicolás Maduro y responsabiliza en parte a su plan económico de ocasionar una dolarización de facto, tras relajar los controles a la economía, así como el recorte de gasto público que ha afectado los salarios del sector público, sometiendo a los trabajadores a un mínimo de tan solo 4,12 dólares al mes, de acuerdo a la tasa oficial, siendo Venezuela el país con la tasa de inflación más alta de América Latina.
«Denunciamos ante el pueblo venezolano, los partidos comunistas, obreros y las fuerzas genuinamente antiimperialistas del mundo, que el Gobierno de Nicolás Maduro ha consumado el asalto contra el Partido Comunista de Venezuela a través de una arbitraria sentencia judicial que avala la imposición de una directiva compuesta por mercenarios al servicio de la cúpula que dirige el PSUV», destaca un comunicado de la Dirección Nacional del Partido, luego de conocer la decisión del TSJ venezolano.
«Este fraude procesal, que violenta los derechos políticos del PCV y del pueblo trabajador venezolano, no solo crea un grave precedente en la historia política y jurídica del país, sino que deja al descubierto el carácter autoritario, antidemocrático y reaccionario del Gobierno-PSUV que equivocadamente cree que con esta maniobra doblegará a las y los comunistas venezolanos», enfatizó el documento.
Según se indicó, la Dirección Nacional del PCV se encuentra reunida «evaluando las acciones jurídicas y políticas, nacionales e internacionales, que impulsará en defensa de nuestro derecho a existir como Partido Comunista y a seguir luchando por el reagrupamiento de las fuerzas políticas, sociales, obreras, campesinas y populares para conquistar una salida revolucionaria a la crisis capitalista venezolana». ¡Al Partido Comunista no lo destruye nadie!, se añade en el comunicado.
Anteriormente, el Tribunal Supremo de Justicia venezolano ha emitido fallos similares contra partidos opositores como Acción Democrática, surgido como un grupo de centroizquierda en los años 40’s, así como Primero Justicia y Voluntad Popular, en 2020. El máximo tribunal luego suspendió la medida de intervención de la junta directiva de Primero Justicia.
Un total de 45 partidos y organizaciones comunistas de todo el mundo se han solidarizado y condenado lo que consideran un «plan para asaltar e intervenir el Partido Comunista de Venezuela (PCV)» por parte del gobierno de Nicolás Maduro.
Según el documento, el vicepresidente del chavismo, Diosdado Cabello, busca «promover y ejecutar el plan dirigido a asaltar al PCV y usurpar sus siglas y personalidad jurídica-electoral, a través de la inaceptable maniobra de utilizar individuos que no forma parte del PCV, con el fin de presentarlos como supuestas bases del partido».
