El grupo también se comprometió a continuar «brindando el apoyo financiero, humanitario, de seguridad y diplomático que Ucrania necesita durante el tiempo que sea necesario».
Los países del Grupo de los Siete condenaron las elecciones en las nuevas regiones de Rusia y en Crimea que se celebraron en el mismo día de votación y las calificaron de ilegítimas, según una declaración de los ministros de Relaciones Exteriores del G7, publicada en el sitio web del gobierno del Reino Unido el martes.
«Estas ‘elecciones’ falsas son una violación más de la independencia, la soberanía y la integridad territorial de Ucrania y de la Carta de la ONU», se lee en la declaración. «Rusia no tiene ninguna base legítima para tales acciones en el territorio de Ucrania. Las ‘elecciones’ falsas son un ejercicio de propaganda destinado a legitimar la toma ilegal del territorio ucraniano por parte de Rusia», enfatizó el documento.
Los ministros de Relaciones Exteriores del G7 prometieron no reconocer nunca a las repúblicas de Donbass, las regiones de Kherson y Zaporozhie, así como a Crimea como parte de Rusia y se comprometieron a continuar «proporcionando el apoyo financiero, humanitario, de seguridad y diplomático que Ucrania necesita durante el tiempo que sea necesario».
Las elecciones en las regiones rusas como parte de la jornada única de votación se celebraron del 8 al 10 de septiembre. En ellas participaron por primera vez las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, y las regiones de Zaporozhie y Kherson después de su acceso a Rusia en septiembre de 2022.
La República de Crimea y Sebastopol, una ciudad con un estatus especial en la península de Crimea, donde la mayoría de los residentes son rusos, se negaron a reconocer la legitimidad de las autoridades que llegaron al poder en medio de disturbios durante un golpe de estado en Ucrania en febrero de 2014.
Crimea y Sebastopol adoptaron declaraciones de independencia el 11 de marzo de 2014. Celebraron un referéndum el 16 de marzo de 2014, en el que el 96,7% de los crimeos y el 95,6% de los votantes de Sebastopol optaron por separarse de Ucrania y unirse a la Federación de Rusia.
El presidente ruso Vladimir Putin firmó los tratados de reunificación el 18 de marzo de 2014. Los documentos fueron ratificados por la Asamblea Federal de Rusia, o parlamento bicameral, el 21 de marzo.
