Así se afirma en un comunicado publicado tras la cumbre UE-EEUU en Washington.
La Unión Europea y Estados Unidos acordaron iniciar el esfuerzo de estudiar una oportunidad de transferir los ingresos de las empresas privadas de los activos rusos congelados a Ucrania, según un comunicado emitido después de la cumbre UE-EEUU en Washington.
«Como parte de nuestros esfuerzos para ayudar a Ucrania, en el corto plazo, exploraremos cómo cualquier ingreso extraordinario en poder de entidades privadas que surja directamente de activos soberanos rusos inmovilizados, cuando esos ingresos extraordinarios no sean necesarios para cumplir con las obligaciones hacia Rusia según las leyes aplicables, podría dirigirse a apoyar a Ucrania», se lee en el comunicado.
Sin embargo, el documento no contiene datos sobre el volumen concreto de la ayuda a Kiev.
Paralelamente, se afirmó que la administración estadounidense considera posible entregar a Ucrania armas y vehículos militares que nunca antes se habían enviado, pero la nueva solicitud de presupuesto para el Congreso estadounidense no menciona tales productos, dijo el asesor de seguridad nacional estadounidense Jake Sullivan.
«Con respecto a Ucrania, la solicitud no detalla específicamente qué sistemas de armas se proporcionarán», dijo el funcionario. Sin embargo, señaló que, «en el transcurso de la guerra, hemos ido añadiendo nuevos sistemas de armas con el tiempo».
«Por lo tanto, este suplemento no responde específicamente a la pregunta de qué sistemas de armas se proporcionarán a Ucrania en términos de capacidades adicionales que no se han proporcionado, pero nos mantendremos estrechamente alineados con el Congreso y consultaremos con ellos como siempre si realmente introducimos una nueva capacidad en Ucrania», dijo el funcionario.
«El presidente tiene la discreción basada en las circunstancias del conflicto, la situación sobre el terreno y las consultas con los aliados para tomar decisiones sobre si proporcionará a Ucrania sistemas de armas que no hemos proporcionado anteriormente», señaló Sullivan.
Reveló que Estados Unidos ha «contratado ciertos tipos de sistemas de armas que aún no se han entregado porque todavía están en producción». “Esperamos que se entreguen en los próximos meses», dijo el representante.
Anteriormente, el presidente estadounidense Joe Biden presentó una solicitud al Congreso estadounidense para proporcionar ayuda militar y de otro tipo adicional a Ucrania e Israel por un valor de unos 106.000 millones de dólares.
Según los documentos adjuntos, publicados por la Casa Blanca, la solicitud para el año fiscal 2024 propone asignar más de 61,4 mil millones de dólares para Ucrania y más de 14,3 mil millones de dólares para Israel.
La UE prohibirá la importación de diamantes rusos como parte del duodécimo paquete de sanciones.
Los diamantes rusos se incluirán en el duodécimo paquete de sanciones de la UE contra Moscú, informó el portal EUObserver refiriéndose a un diplomático europeo.
«El sistema está listo desde hace algunas semanas y ahora lo que estamos esperando es la declaración final del G7 para ponerlo en palabras y confirmar la voluntad del G7 de trabajar con este sistema», dijo el diplomático citado por el portal.
La prohibición del G7 y sus protocolos de trazabilidad fueron elaborados junto con Bélgica, que alberga el centro de comercio de diamantes más grande del mundo en Amberes, y la Comisión Europea, según el portal.
Según EUObserver, este fin de semana o la próxima semana comenzarán conversaciones a puerta cerrada sobre un nuevo paquete de sanciones de la UE contra Rusia.
En estas conversaciones también se discutirá el uso de activos rusos congelados para financiar a Ucrania. Las partes considerarán las propuestas de Lituania y Polonia para introducir restricciones a los servicios rusos de TI, gas natural licuado, uranio y acero, así como para incluir a la corporación estatal Rosatom en las listas de sanciones. Estonia insiste en un embargo comercial total contra Rusia.
Anteriormente, los medios europeos y estadounidenses informaron que el G7 estaba trabajando en un mecanismo para rastrear el origen de los diamantes según su composición química, lo que permitiría identificar los diamantes extraídos en Rusia y limitar sus importaciones de acuerdo con este principio, incluso si fueran en otros países, como la India.
