El presidente ruso acusó a las élites occidentales de hacer de la rusofobia y el neonazismo su ideología oficial.
El presidente ruso Vladimir Putin dijo que Occidente no necesita una Rusia grande. Acusó a las élites occidentales de hacer de la rusofobia y el neonazismo su ideología oficial.
«En principio, Occidente no necesita un país tan grande y multinacional como Rusia». «Nuestra diversidad y unidad de culturas, tradiciones, idiomas y etnias simplemente no encaja en la lógica de los racistas y colonizadores occidentales, en su cruel esquema de total despersonalización, desunión, represión y explotación», dijo Putin en un discurso ante la Asamblea Popular Mundial Rusa por videoconferencia.
«Así que están reutilizando la misma vieja narrativa otra vez: Rusia es una prisión de naciones, y los propios rusos son una nación de esclavos. Hemos escuchado esto muchas veces a lo largo de los siglos», sostuvo. También hemos escuchado que Rusia, resulta que ahora necesita ser descolonizados», afirmó el presidente.
«En realidad, ¿qué es lo que quieren? De hecho, quieren dividir y saquear a Rusia. Si no pueden lograrlo por la fuerza, intentarán sembrar la discordia». «Hoy en día, la rusofobia, otras formas de racismo y el neonazismo se han convertido prácticamente en la ideología oficial de las elites gobernantes occidentales», afirmó Putin.
«Consideramos cualquier interferencia y provocación extranjera destinada a provocar conflictos interétnicos o interreligiosos como acciones agresivas contra nuestro país y como un intento de desafiar a Rusia con el terrorismo y el extremismo como herramienta para luchar contra nosotros», destacó el mandatario. «Responderemos proporcionalmente», enfatizó Putin.
Señaló que estas políticas «están dirigidas no sólo contra los rusos, sino contra todos los pueblos de Rusia: tártaros, chechenos, ávaros, tuvinios, bashkires, buriatos, yakutos, osetios, judíos, ingushes, mari y altaianos». «Somos muchos. No los nombraré a todos ahora, pero está dirigido contra todos los pueblos de Rusia», afirmó el presidente.
Putin señaló que uno de los objetivos era preservar y multiplicar el pueblo de Rusia. «Juntos hemos demostrado nuestra fuerza y voluntad nacional, así como nuestra determinación de proteger nuestros intereses fundamentales, es decir, los intereses fundamentales de los pueblos del país», añadió.
«Salvar y multiplicar al pueblo de Rusia es nuestra tarea para la próxima década. Diré más: para las generaciones venideras. Este es el futuro del mundo ruso y de la Rusia milenaria y eterna», declaró el mandatario.
Añadió que el apoyo a la familia, la maternidad y la infancia debe ser el centro de atención de todas las esferas de la administración pública, las políticas económicas, sociales y de infraestructura, la educación, la educación y la atención de la salud.
«Nos enfrentamos a muchos grandes desafíos que requieren esfuerzos comunes, y estamos listos para este trabajo. Somos más fuertes ahora que nuestras tierras históricas se han reunido con Rusia. La sociedad [rusa] está rechazando todo lo extraño, volviendo a sus verdaderos valores», puntualizó Putin.
«Quiero subrayar que consideramos cualquier injerencia o provocación exterior para generar conflictos interétnicos o interreligiosos [en Rusia] como acciones agresivas contra nuestro país», advirtió el líder ruso.
Rusia ve la soberanía como libertad para su gobierno y su pueblo: Putin.
Rusia considera su soberanía como la libertad de su gobierno y su pueblo, dijo el presidente ruso Vladimir Putin. Destacó que la tradición del pueblo ruso es que una persona no puede sentirse libre «si sus seres queridos, sus hijos, su Patria no son libres».
«¿Qué significa la soberanía para nuestro país, para cada familia, para cada persona? ¿Cuál es su significado, su valor, su contenido real? En primer lugar, es libertad: libertad para Rusia y para nuestro pueblo, y por tanto para cada uno de nosotros», dijo el presidente en su discurso.
«Este es el tipo de verdadera libertad que nuestros muchachos, nuestros hombres, soldados y oficiales, hijas de la Patria, están defendiendo ahora», remarcó Putin, refiriéndose a los participantes en la operación militar especial de Rusia en Ucrania.
«(Este es) un pueblo libre que entiende su responsabilidad hacia el presente y las generaciones futuras. La única fuente de poder. El poder soberano, que está diseñado para servir a cada persona, a toda la nación, y no para servir, por supuesto, a los intereses de alguien, intereses privados, corporativos, de clase y, más aún, extranjeros», continuó diciendo.
Putin afirmó que el desarrollo soberano en interés nacional se construye principalmente en torno a la aspiración de cada persona de beneficiar al país, la sociedad y el pueblo, y Rusia apoya esta aspiración.
«La batalla de Rusia por la soberanía y la justicia es, sin ninguna exageración, de carácter de liberación nacional, ya que se lleva a cabo con el objetivo de defender la seguridad y el bienestar del pueblo ruso, así como bajo el derecho supremo e histórico a ser una Rusia fuerte e independiente, un país de civilización», manifestó Putin.
«Rusia ha cerrado el paso a los que hoy reclaman el dominio del mundo, su exclusividad, y ahora lucha por la libertad no solo de sí misma, sino de todo el mundo, que ya ve que la dictadura de un hegemón es sencillamente peligrosa para los demás», enfatizó el presidente.
«Es nuestro país el que está ahora a la vanguardia de la formación de un orden mundial más justo. Y quiero subrayar que no es posible un orden mundial duradero y estable sin una Rusia soberana y fuerte», agregó Putin.
