La vocera de la Cancillería rusa subrayó que Suiza no puede servir de plataforma para un diálogo de solución del conflicto en Ucrania.
Rusia no participará en la conferencia sobre Ucrania en Suiza, prevista para junio, ni en ningún otro evento sobre la “fórmula de paz” del presidente ucraniano Volodimir Zelenski, dijo en un comentario la portavoz del Ministerio de Realciones Exteriores ruso, María Zajárova.
«Los organizadores suizos de la conferencia tergiversan abiertamente los hechos. Rusia no participará ni en la primera llamada cumbre en Suiza ni en ningún evento que promueva la «fórmula de Zelenski» tipo ultimátum constantemente invitada a tales foros», dijo Zajárova, comentando la declaración de Suiza de que en este momento Rusia no fue invitada a la ‘conferencia de paz’ de junio sobre Ucrania.
La diplomática subrayó que Suiza no puede servir de plataforma para un diálogo de solución. «Este país ha perdido su estatus neutral, su capacidad de ser mediador. Se ha puesto del lado del régimen de Kiev, lo apoya activamente, adopta una posición antirrusa, nos impone sanciones, adopta estrategias que excluyen a Rusia del sistema de Europa seguridad», declaró la funcionaria.
Como informó anteriormente el Departamento Federal de Relaciones Exteriores de Suiza, Berna invitó a más de 160 delegaciones a la conferencia sobre Ucrania, incluidas las de los países del G7, G20 y BRICS. Rusia no ha sido invitada «hasta el momento».
Según indicó Maxim Buyakevich, representante permanente adjunto de Rusia ante la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa, la conferencia para discutir una solución pacífica en Ucrania, organizada por Suiza a petición de las autoridades ucranianas, en realidad tiene como objetivo socavar la seguridad europea y regional.
«Los patrocinadores del régimen de Kiev están tratando de involucrar al máximo número de países para participar en la conferencia prevista para junio en Suiza con respecto a la ‘fórmula de 10 puntos’ supuestamente escrita por (el presidente ucraniano Volodimir] Zelenski», destacó Buyakevich en una reunión de Consejo Permanente de la organización.
Continuó diciendo que cualquier iniciativa que no tenga en cuenta los intereses legítimos de seguridad de Rusia es inútil y está alejada de la realidad. De facto están «destinados a socavar la seguridad regional y global», continuó Buyakevich. Según sus palabras, ni las conversaciones ni su resultado pueden cambiar las realidades políticas y territoriales existentes.
«Expresamos nuestro agradecimiento a nuestros aliados y socios en el mundo que entienden de dónde surge realmente la idea de celebrar una conferencia suiza y que se abstendrán de participar en dicha reunión», añadió el diplomático ruso.
Ucrania dejará de existir a menos que inicie conversaciones, advierte el presidente bielorruso.
Ucrania puede perder su condición de Estado a menos que inicie conversaciones, dijo el presidente bielorruso, Alexander Lukashenko. «La situación es muy grave. Creo que si Ucrania no entabla negociaciones, eventualmente perderá su condición de Estado y puede dejar de existir», señaló ante la Asamblea Popular de Bielorrusia.
Según Lukashenko, «esta es la mejor situación para hacer las paces y firmar un tratado de paz». El presidente bielorruso añadió que su homólogo ucraniano, Volodimir Zelenski, debería tener expectativas realistas. Según él, Ucrania se encuentra ahora en la situación más grave y favorable para un tratado de paz.
Lukashenko señaló que las tropas rusas han liberado varios asentamientos en Ucrania, pero que el progreso es «muy lento». «Hay una especie de presión, como decimos. Ni ellos, ni los ucranianos, ni los rusos. Es un punto muerto», afirmó el líder bielorruso.
Según él, Ucrania ahora necesita hacer las paces, como lo demuestra la huida de los ucranianos del país para evitar ir al frente. Lukashenko añadió que en Ucrania los hombres son sacados de las calles y a menudo enviados directamente a la zona de guerra sin entrenamiento.
Lukashenko sugirió iniciar las conversaciones con los acuerdos de Estambul, un paquete de acuerdos que incluía disposiciones sobre neutralidad y garantías de seguridad. El presidente bielorruso señaló que es poco probable que estos acuerdos se adopten o sirvan de base para un tratado de paz, pero es posible comenzar con ellos.
Según sus palabras, los militares, los jefes de los servicios secretos occidentales, los políticos y los líderes de Estado ya dicen públicamente que «Putin no debería ganar». Lukashenko calificó tales declaraciones como «un momento para las negociaciones» y sugirió «hacer un empate», instando a no proponer soluciones como la llamada fórmula de paz de Zelenski.
Esta iniciativa no tiene en cuenta la posición de Moscú; prevé la retirada completa de las fuerzas rusas a las fronteras de 1991 y el regreso a Ucrania del control de la «zona económica exclusiva» en el Mar de Azov y el Mar Negro.
El presidente bielorruso señaló que los rusos hoy «no abandonarán Crimea ni las regiones orientales», por lo que presentar propuestas inaceptables para las negociaciones demuestra que no están dispuestos a negociar.
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