Military Watch Magazine destaca en un artículo el alto nivel de automatización «sin precedentes» de esos cazabombarderos.
El medio de comunicación estadounidense, Military Watch Magazine, especializado en evaluar el poderío militar a nivel internacional, destacó en un reciente artículo las cualidades referentes al cazabombardero ruso SU-57, tomando en cuenta las afirmaciones brindadas por la estatal rusa Corporación Unida de Aeronaves (CUA).
El sitio destaca nuevos detalles con respecto a la cabina del caza de peso pesado de próxima generación del país, el Su-57, que «ha experimentado un nivel de automatización sin precedentes para reducir la carga de los pilotos».
«Los aviones de combate rusos se han beneficiado de una mayor automatización en las sucesivas generaciones, siendo el primer jet de combate de cuarta generación del país, el MiG-31, un líder mundial en esto con respecto a la primera vez que entró en servicio», indica el texto de Military Watch Magazine.
Además, señala el artículo que «el Su-57 está configurado actualmente como un caza de quinta generación, aunque se espera que los modelos de producción posteriores ofrezcan capacidad de sexta generación con una serie de nuevas tecnologías que se están desarrollando para ellos».
En ese sentido, la revista norteamericana se hace eco de las afirmaciones rflejadas en una publicación de una homóloga rusa «New Horizons» (Nuevos Horizontes), que está dirigida por la United Aircraft Corporation rusa, y en la cuál, el jefe del Departamento de Cabina de Piloto de la corporación, Nikita Dorofeyev, manifestó que «la automatización, la integración de información y el apoyo intelectual son los requisitos que definen la ergonomía de la cabina de un caza moderno».
Según refirió el experto, explicando esa técnica militar, «en teoría, el piloto, después del despegue y antes de la aproximación de aterrizaje, puede no volar en absoluto, sino buscar y atacar objetivos. Además, este proceso también está suficientemente automatizado», aseguró.
Military Watch Magazine, destacó que, a partir dela publicación hecha por la CUA, «la información compleja tanto sobre la situación táctica como sobre los sistemas de la aeronave no se puede acomodar simultáneamente en el área de visualización de la cabina del caza de un solo asiento, y correría el riesgo de abrumar a un piloto humano».
En corespondencia, «dado que los modelos de caza rusos que se producen en mayor número en la actualidad son plataformas de dos asientos, a saber, el Su-30SM y el Su-34, que pueden acomodar a un operador de sistemas de armas para ayudar al piloto a responder a los datos y al armamento operativo, el Su-57 ha requerido una mayor automatización para permitir que un solo piloto funcione con la misma eficiencia», indicó su sitiio web.
En ese orden, detalla la revista especializada, «esto ha incluido no solo una mayor automatización, sino también el uso de inteligencia artificial, actualmente en un grado limitado, pero probablemente en mayor medida en el futuro. El caza actualmente se asegura de que los pilotos reciban solo los datos requeridos según la misión».
Además, añade el artículo. «se están haciendo consideraciones para una posible variante de asiento doble del Su-57, particularmente para la exportación con al menos un cliente potencial que ha expresado su preferencia por tales configuraciones».
Por otra parte, indica Military Watch Magazine, que «la necesidad de aviones de combate biplaza en un momento en el que la aplicabilidad de la inteligencia artificial aumenta rápidamente ha sido cuestionada en varios países, sin que ningún caza de quinta generación se haya desarrollado todavía en una variante de biplaza».
El Su-57 entró en servicio en la Fuerza Aérea Rusa a partir de diciembre de 2020, y fue el tercer caza de su generación en entrar en funcionamiento después del F-22 y F-35 estadounidenses y el J-20 de la Fuerza Aérea de China.
