Los registros de un barco alemán hundido en 1945 posibilitó dar con su paradero oculto en Estados Unidos.
Un antiguo guardia de un campo de concentración nazi que vivió todo este tiempo oculto en EEUU durante décadas, fue descubierto y deportado hacia Alemania, una vez que su apelación contra la orden de su traslado fuera rechazada en noviembre del 2020.
Según informó el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) de Estados Unidos, Friedrich Karl Berger, de 95 años de edad, logró encubrir su verdadera identidad en el país norteño desde finalizada la Segunda Guerra Mundial, hasta que unos registros pertenecientes a las SS (cuerpo militar al servicio personal del dictador Adolf Hitler), hallados en un barco alemán hundido en 1945, indicaron su sirvió como guardia de seguridad del campo de concentración nazi de Neuengamme, ubicado en Hamburgo.
«Estamos comprometidos en garantizar que EEUU no sirva como un refugio seguro para los violadores de los derechos humanos y los criminales de guerra», indicó el director interino del ICE, Tae Johnson, quién además aseguró que en ese departamento nunca se dejará «de perseguir a quienes persiguen a otros».
Karl Berger fue partícipe de la evacuación forzosa de los prisioneros al campo principal de Neuengamme, en un viaje que duró unas dos semanas en condiciones infrahumanas, que provocó la muerte de unos 70 detenidos, durante 1945, una vez se produjo el avance de las tropas aliadas británicas y canadienses, y los nazis abandonaron la ciudad de Meppen.
En NeuengammeSe se concentró a más de 80.000 hombres y 13.500 mujeres, y unos 42.000 reclusos, entre los que se encontraban judíos, polacos y prisioneros de guerra rusos, los cuáles fueron sometidos a trabajos forzosos hasta la muerte.
El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas norteamericano reveló que Berger todavía recibe una pensión por parte de Alemania, justificada por su trabajo para el país, resaltando que en ello está «incluido su servicio en tiempos de guerra».
