Las palabras del líder norcoreano han tenido lugar al conmemorar el 68º aniversario de la firma del armisticio entre las dos Coreas que puso fin a la guerra en la península asiática.
Este martes, el líder de la República Popular Democrática de Corea, Kim Jong-un, afirmó mediante un discurso que las dificultades a las que se está enfrentando el país durante la pandemia global del coronavirus y al aislamiento económico impuesto por potencias occidentales lideradas por Estados Unidos son comparables a la situación vivida durante la ‘Guerra de Corea’, destacó la estatl Agencia Telegráfica Central de Corea (KCNA).
«Es imposible contener mi alegría y emoción al celebrar el gran Día de la Victoria de nuestro país sentándome aquí nuevamente con los compañeros mayores de la revolución, a quienes todos respetamos y servimos de modelo», inició así su discurso el mandatario norcoreano ante una representación de los veteranos de su país.
«Para nosotros hoy, la crisis sanitaria mundial sin precedentes y las penurias y dificultades causadas por el prolongado bloqueo se están convirtiendo en un punto de inflexión de la terrible experiencia que es nada menos que la situación que se vivió durante la guerra», declaró Kim.
Las palabras del líder norcoreano han tenido lugar al conmemorar el 68º aniversario de la firma del armisticio entre las dos Coreas que puso fin a la guerra en la península asiática, en el marco de una convención nacional de veteranos.
«Abracé el mito de una sucesión milagrosa en medio de un fuego feroz durante tres años, y honré mi época de manera heroica. Hoy, con una imagen tan corregida, mis respetados veteranos y camaradas militares que asistieron al evento del Día de la Victoria y a la guerra de liberación nacional de todo el país, me gustaría expresar mi más profundo agradecimiento a los veteranos y veteranas de la exposición», afirmó el líder supremo de Corea del Norte.
Kim Jon-un hizo un llamado para que la generación actual continue poniendo en práctica la tradición de los antepasados, los cuáles «ganaron la guerra y sacrificaron» mucho para ayudar a reconstruir el país», remarcó el también secretario general del Partido de los Trabajadores de Corea.
Según él, esta generación debe hacer todo lo posible para que la RPDC «se fortalezca y prospere sin fin». «Una generación consciente de esta sagrada misión histórica y su deber nunca decaerá ni se desintegrará, y avanzará con valentía y firmeza», puntualizó el mandatario.
«En el camino del glorioso desarrollo de nuestra República, los logros de las generaciones sucesivas, la segunda generación de la revolución, se elevan y brillan como un gran pico histórico», resaltó Kim.
«La vida libre de decenas de millones de personas, nuestro verdadero sistema, hermosas montañas y arroyos y preciosos recursos naturales son inconcebibles aparte de las hazañas de los innumerables guerreros que protegieron el continente del país con su sangre», enfatizó.
En su discurso, Kim Jon-un reiteró su agradecimiento personal al hito que representa la victoria alcanzada por el Ejército Popular de Corea del Norte en aras de defender su Patria del fuego enemigo imperialista. «Debido a que los valientes defensores de la patria en la década de 1950 repelieron resueltamente la agresión del robo de la época del imperialismo estadounidense, generaciones de descendientes hasta hoy pudieron disfrutar de la dignidad de un pueblo independiente sin conocer los sufrimientos de la esclavitud», remarcó.
«La excelente tradición de lucha que apoya y protege absolutamente el Centro del Partido como modelo para nuestro Partido y el pueblo para las generaciones venideras, y el noble espíritu colectivista de uno para todos y todos para uno, y la relación comunista también son lo mismo. Fue creado por la gran generación revolucionaria», expresó Kim Jon-un.
«Los defensores y constructores de la Patria en el decenio de 1950, que defendieron con honor nuestra gloriosa República Popular Democrática de Corea y proporcionaron un espíritu inmortal de heroísmo para las generaciones venideras», destacó el líder norcoreano.
«Para nosotros hoy, la crisis de salud mundial sin precedentes y las penurias y dificultades causadas por el bloqueo a largo plazo se están convirtiendo en un punto de inflexión de la terrible experiencia que es nada menos que la situación de guerra», manifestó Kim Jon-un, añadiendo que: «así como las generaciones anteriores demostraron el mayor coraje frente a la mayor crisis nacional y trajeron las mayores victorias y honores, nuestra generación continuará la maravillosa tradición y convertirá los difíciles obstáculos de hoy en nuevas y mayores victorias».
El conflicto militar entre las dos Coreas se desarrolló entre 1950 y 1953 y costó la vida a más de 3 millones de civiles, de un lado, la República de Corea (Corea del Sur), fue apoyada militarmente por una coalición de 17 Estados liderada por EEUU, y la República Popular Democrática de Corea (Corea del Norte), fue respaldada por la República Popular China y la Unión Soviética.
