Las fuerzas lideradas por Ahmad Masud, formadas en su mayoría por exintegrantes del Ejército afgano y de servicios especiales formados durante la ocupación militar encabezada por EEUU, hicieron un llamado para ser apoyadas por Occidente.
En el valle de Panjshir, se ha concentrado una numerosa fuerza de resistencia (Frente de Resistencia Nacional), luego de la toma del poder por el movimiento extremista islámico en Afganistán, las mismas están lideradas por Ahmad Masud, y conformadas en su mayoría por exintegrantes del Ejército afgano y de servicios especiales que fueron creados durante los 20 años que duró la ocupación militar occidental encabezada por EEUU.
En el pasado, la región había sido un bastión de los combatientes al mando de Ahmad Shah Masud (padre de Ahmad Masud), considerado un «héroe nacional», por oponerse a la presencia de los militares soviéticos en la década de 1980 y luego a los talibanes antes del 2001.
Ahmad Shah Masud fue asesinado por los terroristas de Al Qaeda unos días antes de que se perpetraran los ataques del 11 de septiembre en Estados Unidos.
En un artículo de opinión publicado en The Washington Post Ahmad Masud, de 32 años, aseguró que está «listo para seguir los pasos» de su padre, junto con los combatientes muyahidines, aproximadamente unos 9.000 integrantes, los cuáles dijo, «están dispuestos a volver a enfrentarse a los talibanes», contando para ello con gran cantidad de «almacenes de municiones y armas», destactó.
«Los amigos de Afganistán en Occidente intercedan por los millones de afganos que comparten sus valores». «Hemos luchado durante mucho tiempo para tener una sociedad abierta, una en la que las chicas puedan convertirse en doctoras y nuestra prensa reportar libremente, donde nuestros jóvenes puedan bailar y escuchar música o asistir a partidos de fútbol en estadios que fueron utilizados por los talibanes para ejecuciones públicas», «y cuya práctica puede repetirse pronto», remarcó el líder rebelde en el texto.
Entre tanto, el pasado domingo, los talibanes dieron un ultimátum a Masud de cuatro horas para rendirse. «Si se rinden dentro del tiempo estipulado, todo estará bien. De lo contrario, los castigaremos», afirmó el portavoz de los talibanes, Zabihullah Mujahid, luego de asegurar que sus fuerzas recuperaron el control de todos los distritos en el norte de Afganistán, indicando que habían rodeado y sitiado la base opositora en el valle de Panjshir.
Informaciones de prensa daban cuenta que los distritos de Bano, Deh Saleh y Pul e-Hesar fueron tomados por los combatientes de la resistencia la semana pasada. concentrándose en el valle de Panjshir, una región que está ubicada a unos 120-150 kilómetros de Kabul, la capital del país.
«Si los señores de la guerra talibanes se lanzan al asalto, se enfrentarán, por supuesto, a nuestra firme resistencia», enfatizó Ahmad Masud en declaraciones al canal Al Arabiya. y advirtió a los talibanes que el escenario de guerra civil será «inevitable» si se niegan a dialogar en aras de conformar un Gobierno que incluya, tanto a los talibanes como a otras fuerzas del país.
En una carta publicada en la revista francesa La Règle du Jeu, el líder de la resistencia afgana a los talibanes apeló al pueblo de su país para unirse en la lucha por la libertad en contra del régimen opresor extremista islámico’.
«Llamamos a todos los afganos libres, a todos los que rechazan la servidumbre, a unirse a nuestro bastión de Panjshir, la última región libre de nuestra atormentada tierra. A los afganos de todas las regiones y tribus, les digo: ¡Luchen con nosotros!», declaró Masud.
Un reporte de la agencia de noticias rusa Ria Novosti, asegura que unos 10.000 efectivos del Ejército afgano se dirigían a la zona de Panjshir para respaldar al Frente de Resistencia Nacional, al cuál también se unió el ex primer vicepresidente afgano Amrullah Saleh, que el martes pasado se autoproclamó como presidente interino de Afganistá a través de su cuenta de Twitter, y luego de la huida del expresidente Ashraf Ghani.
