Al comentar sobre la posibilidad de que Rusia y Ucrania discutan el problema de Donbass, Peskov recordó que Rusia no es parte del conflicto en el sureste de Ucrania.
El secretario de prensa presidencial ruso, Dmitry Peskov, declaró este lunes en rueda de prensa que un posible referéndum sobre Donbass, que no fue descartado por el presidente ucraniano Volodomir Zelensky, es un asunto interno de Ucrania, pero es interesante saber cómo se podría redactar la pregunta que se somete a votación, remarcó el funcionario ruso.
«Un referéndum sobre Donbass es un asunto interno de Ucrania. Naturalmente, es interesante saber cómo se podría redactar la pregunta para este referéndum», dijo Peskov. Al comentar sobre la posibilidad de que Rusia y Ucrania discutan el problema de Donbass, Peskov recordó que Rusia no es parte del conflicto en el sureste de Ucrania.
«Es el conflicto interno de Ucrania y sólo puede resolverse por medios pacíficos, a través de contactos directos entre el oficial de Kiev y los representantes de las autoproclamadas repúblicas», subrayó el vocero del Kremlin.
Anteriormente, en una entrevista con el canal de televisión ucraniano 1 + 1, el viernes pasado, Zelensky destacó que no descartaba la celebración de un referéndum «sobre Donbass en general». Sin embargo, en sus palabras, «no se trata de su estatus».
Las regiones del sudeste de Ucrania, donde la mayoría de los residentes son de habla rusa, se negaron a reconocer la legitimidad de las autoridades ucranianas llevadas al poder en medio de disturbios durante un golpe de Estado en Ucrania en febrero de 2014.
En respuesta a las protestas de base en estas áreas, las autoridades de Kiev lanzaron una operación militar en Donbass a mediados de abril de 2014. El bombardeo a gran escala de viviendas, incluido el uso de la aviación, provocó un desastre humanitario en la región. En medio de estas condiciones, se organizó un referéndum sobre la autodeterminación de la República Popular de Lugansk (LPR) y la República Popular de Donetsk (DPR), proclamándose su soberanía estatal el 12 de mayo de 2014.
Un arreglo de paz del conflicto en Donbass se basa en el Paquete de Medidas, conocido como Minsk-2, que fue firmado por el Grupo de Contacto Trilateral sobre Ucrania integrado por altos representantes de Rusia, Ucrania y el organismo de control de seguridad europeo OSCE el 12 de febrero de 2015. después de un maratón de conversaciones de 16 horas entre los líderes de las cuatro naciones de Normandía, a saber, Rusia, Alemania, Francia y Ucrania.
El documento de 13 puntos prevé un alto el fuego entre las fuerzas gubernamentales ucranianas y las milicias populares en las repúblicas autoproclamadas de Donetsk y Lugansk y la posterior retirada de las armas pesadas de la línea de contacto. El acuerdo también establece una hoja de ruta para un acuerdo duradero en Ucrania, que incluye una amnistía, cambios de prisioneros, la reanudación de los lazos económicos, elecciones locales y reforma constitucional para dar más autonomía a las regiones orientales devastadas por la guerra.
Sin embargo, los llamados ‘acuerdos de Minsk’ no han sido cumplidos practicamente en su totalidad por las autoridades ucranianas, que han adoptado una vez más en idear planes para resolver ese conflicto por medio de la fuerza.
