Además, según el informe, Washington aunó esfuerzos para contrarrestar las «fuerzas malignas» de Cuba, Venezuela y Rusia en la región.
El informe anual del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos, reconoció haber presionado al gobierno de Brasil para que no adquiriese la vacuna rusa contra la Covid-19, Sputnik V, como parte de los esfuerzos comunes para frenar el auge de la influencia de Rusia en la región latinoamericana.
Bajo el subtítulo: «Combatiendo las influencias malignas en las Américas», el texto aborda las actividades llevadas a cabo por la Oficina de Asuntos Globales (OGA) del Departamento de Salud estadounidense, valiédose de las relaciones diplomáticas como medio factible para «mitigar los esfuerzos de los estados, incluidos Cuba, Venezuela y Rusia, que están trabajando para aumentar su influencia en la región en detrimento de la seguridad de EEUU», resalta el documento.
«La OGA coordinó con otras agencias gubernamentales de EE.UU. para fortalecer las relaciones diplomáticas y ofrecer asistencia técnica y humanitaria para disuadir a los países de la región de aceptar ayuda de estos estados con malas intenciones», indica el informe del 2020.
El Departamento de Salud norteamericano revela que la OGA se utilizó para persuadir a Brasil a fin de que rechace la compra de la vacuna rusa contra el coronavirus, y de igual manera se disuadió a las autoridades de Panamá de no aceptar la ayuda de los médicos cubanos.
«OGA utilizó relaciones diplomáticas en las Américas región para mitigar los esfuerzos de los estados, incluidos Cuba, Venezuela y Rusia, que están trabajando para aumentar su influencia en la región en detrimento de la seguridad de Estados Unidos. OGA coordinado con otras agencias gubernamentales de los Estados Unidos para fortalecer los lazos diplomáticos y ofrecer servicios técnicos y asistencia humanitaria para disuadir a los países de la región de aceptar ayuda de estos estados mal intencionados», indica el informe.
«Los ejemplos incluyen el uso de la oficina de salud de OGA para persuadir a Brasil de rechazar la vacuna rusa contra la Covid-19 y ofrecer asistencia técnica a los CDC en lugar de que Panamá acepte una oferta de médicos cubanos», reseña el documento del Departamento de Salud de EEUU.
Por otra parte, el informe señala que al 2020 ha sido «uno de los años más desafiantes en la historia» de Estados Unidos, y asegura al mismo tiempo, el fin de la pandemia en el país norteño, gracias a la entrega de vacunas «seguras y efectivas» a través de la «Operación Warp Speed», que es un programa público y privado en EEUU con la finalidad de crear vacunas y métodos de tratamiento contra la Covid-19.
